CARTA A CAMILO

El miércoles me levanté con la tristísima noticia; y pensé "otra vez le tocó a Mayada", por qué a él? ?, por qué el destino se vuelve a ensañar con este muchacho con cara de bueno y perfil bajo?, por qué otra vez?, por qué hoy?, y hay muchos "por qué" que quedan sin respuestas, que la vida no te las puede dar. Si a veces no entendés la vida, mucho menos la muerte y de alguien tan joven. Como decía María Teresa de Calcuta "la muerte es el mayor misterio de la vida". Los que pasamos por ese duro momento te podemos entender. No perdón, no te entiendo; el dolor es personal e intransferible; es tuyo. Y como a vos no le duele a nadie. Te van a decir montones de frases armadas "lo siento...", "te acompaño el sentimiento...", "Ahora no sufre...", pero ninguna de éstas te van a llenar el vacío en el alma; tenés el corazón atravesado por una lanza, y la puta si duele!!!. Cuando un esposo/a pierde a su compañero/a se llama viudo/a; Cuando un hijo/a pierde a un padre o una madre se llama huérfano. Pero cuando se pierde un hijo o un hermano no hay nada; porque no hay palabras, capaces que puedan explicar tanto dolor. Si lo sabré yo!!!!! cuando aquella fría noche de Mayo, una cruda enfermedad, y en mis propios brazos puso fin a tantos proyectos. Recibía el golpe más duro. quedé de rodillas, quedé nocaut. Si lo sabré yo!!!!, como se extraña ese hombro, cuando ibamos abrazados a tomar el 28 en Gral. Paz camino al Monumental. Querido Camilo vas a atravesar distintas etapas de un duelo interminable, y cuando la noche te atormente. una estrella bajará a alumbrar tanta oscuridad, y seguro, pero seguro será Tatiana que viene a hacerte compañía, porque el amor es eso que se siente y lo que se siente no muere jamás. Creéme Camilo, la muerte no existe; solo viene a romper las ligaduras, las que nos encadenan a un cuerpo que Dios nos puso. Ese envase que tanto duele. La vida es un viaje, y hay quienes se adelantaron en ese viaje: pero no lo dudes ya volveremos a encontrarnos con nuestros seres queridos, los veremos transfigurados, felices, y no esperando la muerte, esa palabra que a los terrenales tanto nos asusta. Tatiana ya es un ángel y ya se habrán juntado con mi querido hermano Facu, y juntos van a gritar tus goles, seguro!!. Si en algo te puede acariciar el alma este cuento; que por supuesto no es mio, ahí va: "En una isla se encuentran todas las emociones, y la Sabiduría les comunica que la isla se va a hundir. Todos dijeron no puede ser. La sabiduría contestó yo nunca me equivoco, y ya me voy en un avion a otra isla junto a la previsión, les recomiendo que hagan lo mismo; y la isla se empezó a hundir. Pasó un barco con la riqueza y el amor le dijo, riqueza puedo subir?? y la riqueza le dijo No, el barco está lleno de oro y joyas no hay lugar para vos, lo siento. La isla se hundía más. Pasó otro barco con la tristeza y el amor le suplicó que lo lleve; a lo que la tristeza le contestó no, estoy muy deprimida y prefiero estar sola. La isla se hundía cada vez más y más y ya casi tapaba al amor, pero de pronto pasó un viejito, muy viejito en un botecito y le dijo, no te preocupes, yo te voy a salvar. Y lo llevó muy despacito a otra isla. Se salvaron; pero el viejecito desapareció sin que el amor le diera las gracias. Cuando llegó a esta otra isla, se encontró nuevamente con la sabiduría y le preguntó quien era el viejito que lo había salvado; y la sabiduría le dijo No lo conocés"". Es el tiempo.!!" y solamente el tiempo puede ayudar a que el amor supere una perdida de algo que ahora no está. Dios te bendiga Camilo Mayada.