SE GANA EN CASA
River viajó a la altura de Bogotá para jugar el primer mano a mano por la final de la Recopa Sudamericana. Este equipo nuevo que necesita conocerse dejó más dudas que certezas, aunque en los papeles, el empate deja un sabor dulce en el paladar millonario. Batalla tuvo su debut en una final, dudó bastante y un error de cálculos en una salida pudo costar un gol. Le falta firmeza y prestancia, conceptos no menores para ocupar el arco del más grande. La reciclada defensa supo aguantar los pobres ataques de los colombianos: Moreira mostró su sangre guaraní corriendo y metiendo, fue de los mejores del partido y es positivo para el equipo. Maidana fue Maidana, lìder y zaguero vital. Mina debutó yendo bien de arriba y realizando un corte que pudo haber sido gol de Independiente; central duro y feroz, erró en varias oportunidades y cometió faltas innecesarias. Casco sigue en alza, se afianza poco a poco y genera buenas expectativas. El dibujo táctico luego de la defensa sigue con este 2-2-2. Con muchos zurdos y poca marca. Ponzio demostró su carácter de líder y salvó un gol en la línea, Nacho Fernández sigue sin gravitar, flojo de piernas y tibio, no supo darle el cambio de ritmo que Gallardo quiere. D´Allessandro no tuvo su mejor noche, se lo vio apagado y se fastidió mucho cuando le pegaron. A Pity Martínez la 10 le sigue quedando enorme, volvió a tener un partido gris. Pipa Alario fue desaprovechado, le llovieron pelotazos todo el partido, se tuvo que fajar con los centrales colombianos y no le llegaron pelotas claras; siempre es peligroso y determinante en partidos claves, tendrá revancha en Núñez. Gordo Driussi, el pibe mimado de Gallardo, tuvo su lugar donde se siente más cómodo, como segundo delantero. Al igual que Alario no recibió pelotas limpias y no pudo ser determinante en los metros finales. Cero a cero en Colombia en un partido trabado y duro. A esperar la vuelta. Independiente no supo aprovechar la localía, y el próximo jueves en el Monumental, con nuestra gente, con el posible debut de Larrondo y con el fuego Sagrado de Muñeco Gallardo, la Recopa Sudamericana se gana en casa.
Cesar Francolino.